El fosa (Cryptoprocta ferox)

Es un mamífero carnívoro originario de Madagascar.  y se lo puede encontrar solamente en esta isla en estado salvaje. Aunque su aspecto es el del un felino, el fosa es en realidad un "euplérido" y está estrechamente vinculado con la familia de la mangosta (Herpestidae). Su estado de conservación es "Vulnerable".

Como no existen en la isla otros mamíferos carnívoros el fosa es el depredador dominante de la isla. Su gran tamaño (el doble que un gato doméstico) es otro ejemplo del llamado “gigantismo insular” que se da en Madagascar.

El tamaño del fosa podría asemejarse al de un puma pequeño. Los adultos tienen una longitud de cabeza y cuerpo de 70 a 80 cm y pesan entre 5.5 y 8.6 Kg., siendo los machos más grandes que las hembras.

Poseen garras semi-retráctiles (las pueden extender pero no retraer completamente) y tobillos flexibles que les permiten subir y bajar los árboles, o simplemente saltar de uno a otro como lo haría un gato.

La especie está muy extendida en la isla, aunque las densidades de población suelen ser bajas. Se encuentra únicamente en el hábitat boscoso y caza activamente tanto de día como de noche.

Más del 50% de su dieta consiste en lémures, los singulares primates endémicos de la isla, pero también se alimenta de roedores, lagartos, aves y otros animales también están documentados como presas.

Usualmente la especie suele aparearse en árboles. Las camadas varían de una a seis crías, que nacen ciegas y sin dientes (altricial). Los bebés destetan después de 4 meses y medio, pero logran ser independientes después de un año.

La madurez sexual ocurre alrededor de los tres o cuatro años de edad, y la esperanza de vida en cautiverio es de 20 años. La fosa está clasificada como una especie vulnerable por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. La mayor amenaza para la especie es la destrucción del hábitat .



Genitales
Una de las características físicas más peculiares de esta especie son sus genitales. El fosa macho tiene un pene y un baculum (hueso del pene) inusualmente largo, que se extiende entre sus patas delanteras cuando está erecto, con un grosor promedio de 20 mm.

El glande se extiende aproximadamente a la mitad del eje y es espinoso, excepto en la punta. En comparación con el glande de los felinos, es mas corto y espinoso, mientras que comparado con el de las viverridas es mas suave y largo.

La fosa hembra muestra una masculinización transitoria, que comienza aproximadamente al año de edad en donde desarrolla un clítoris espinoso agrandado que se asemeja al pene de un macho.

El clítoris de las hembras disminuye de tamaño a medida que el animal crece. Las hembras no tienen un pseudo-escroto, pero segregan una sustancia naranja que colorea sus partes inferiores.

Los niveles hormonales (principalmente de testosterona , androstenediona y dihidrotestosterona) no parecen participar en esta masculinización transitoria, ya que esos niveles son los mismos en los juveniles masculinizados y en los adultos no masculinizados.

Se especula que la masculinización transitoria reduce el acoso sexual de las hembras juveniles por parte de los machos adultos o reduce la agresión de otras hembras (por compartir territorio). Aunque hembras de otras especies de mamíferos (como la hiena) tienen un pseudo-pene, no se conoce de ninguna otra especie que disminuya de tamaño de sus genitales a medida que el animal crece.

Comparación con otros carnívoros relacionados
En general, el fosa tiene características en común con tres familias carnívoras diferentes, lo que lleva a los investigadores a ubicar la especie (y otros miembros de Eupleridae) alternativamente en Herpestidae, Viverridae y Felidae.

Con los felinos están asociadas en la alimentación y la digestión, con dientes, las partes faciales del cráneo, la lengua y el tracto digestivo muy similar.

El resto del cráneo se parece más a los cráneos del género Viverra, mientras que la estructura general del cuerpo es más similar a la de varios miembros de Herpestidae.

El fosa tiene un rinario grande y prominente similar al de las viverridas, pero tiene orejas redondas comparativamente más grandes, casi tan grandes como las de un felino de tamaño similar.

Comportamiento
El fosa está activa tanto de día como de noche. Sus picos de actividad pueden ocurrir temprano en la mañana, cuando empieza a anochecer y tarde ya entrada la noche.

La especie generalmente no "reutiliza" los sitios para dormir, salvo las hembras con sus crías. Un fosa macho necesita 26 km2 para delimitar su  territorio de caza y apareamiento, las hembras tienen espacios menores y no superan los 13 km2.

Los machos pueden superponer cerca de un 30% de su territorio, en cambio las hembras no comparten territorios con otras hembras.

La densidad de la población del animal parece ser baja. En el Bosque de Kirindy, su densidad se estimó en un animal por cada 4 km2 en 1998.

Son animales solitarios y ocasionalmente se pueden ver a un par de machos cazando juntos. Una publicación de 2009, informó sobre una observación detallada de la caza cooperativa de la especie, en la que tres fosas machos cazaron un sifaka (Propithecus verreauxi) de 3 kg y posteriormente compartieron la presa. Este comportamiento puede ser un vestigio de la caza cooperativa que se habría requerido para acabar con los lémures más grandes recientemente extintos que habitaron la isla.

Los fosas se comunican utilizando sonidos, aromas y señales visuales. Las vocalizaciones incluyen ronroneo, una llamada amenazadora y una llamada de miedo, que consiste en "inhalaciones ruidosas y repetidas".

Un aullido largo y alto puede funcionar para atraer a otros fosas. Las hembras maullan durante el apareamiento y los machos producen “suspiros” cuando encuentran una hembra. A lo largo del año, los animales producen marcas de olor (de persistente duración) en rocas, árboles y el suelo utilizando glándulas en la región anal y en el pecho. También se comunican mediante la expresión facial y corporal, pero el significado de estas señales es incierto.

Es un animal agresivo solo durante el apareamiento en donde los machos luchan entre si por conseguir una hembra. Después de una pelea corta, el perdedor huye y es seguido por el ganador por una corta distancia como para asegurar su retirada.

Estado de conservación
La lista roja de la UICN ha evaluado la fosa como "Vulnerable" desde 2008, ya que el tamaño de su población probablemente ha disminuido en al menos un 30 por ciento entre 1987 y 2008.

Las evaluaciones anteriores han incluido " En peligro " (2000) y "Estado de conservación desconocido" (1988, 1990, 1994).

La especie depende totalmente del bosque y, por lo tanto, está amenazada por la destrucción generalizada del bosque nativo de Madagascar.

Con el objetivo de estudiar la salud genética y la dinámica poblacional de los fosas se han marcado y estudiado algunos ejemplares cautivos y en estado salvaje. Estas medidas han llevado a aislar varios patógenos de la fosa, algunos de los cuales, como el ántrax y el moquillo canino, se cree que fueron transmitidos por perros o gatos salvajes.



Aunque la especie está ampliamente distribuida en la isla, es localmente rara en todas las regiones, lo que hace que los fosas sean particularmente vulnerables a la extinción. Los efectos de la fragmentación del hábitat aumentan el riesgo.

Por su tamaño, la fosa tiene una densidad de población inferior a la prevista, que se ve amenazada por la rápida desaparición de los bosques de Madagascar y la disminución de las poblaciones de lémures, que constituyen una alta proporción de su dieta.

La pérdida de la fosa, ya sea local o completamente, podría impactar significativamente la dinámica del ecosistema, posiblemente llevando a un exceso de sus habituales presas. La población total de la fosas que vive en áreas protegidas se estima en menos de 2.500 adultos.

Se cree que existen solo dos áreas protegidas que contienen 500 o más fosas adultas: el Parque Nacional de Masoalay y el Parque Nacional Midongy-Sud, aunque también se cree que están sobreestimados.

Se ha recopilado muy poca información sobre la población para un análisis formal de la viabilidad de la población, pero las estimaciones sugieren que ninguna de las áreas protegidas respalda a una población viable. Si esto es correcto, la extinción de la fosa podria llegar en 100 años a medida que la especie disminuye gradualmente.

Para que la especie sobreviva, se estima que se necesitan al menos 555 km2 de bosque nativo para mantener poblaciones más pequeñas, viables a corto plazo, y al menos 2,000 km 2 para una poblaciones de 500 adultos.

La fosa tradicionalmente ha sido odiada y catalogada como un animal peligroso. Se ha descrito la especio como "codiciosa y agresiva", conocido por cazar aves y lechones de corral, y al igual que los lobos, viejas leyendas hablan que podian atacar a un humano pequeño.

Un estudio publicado en 2009 informó que el 57 por ciento de las aldeas en el bosque Makira consumen carne de fosa.

Existen fosas en cautiverio en zoológicos. Se criaron en cautiverio por primera vez en 1974 en el zoológico de Montpellier, Francia. Al año siguiente, el zoológico de Duisburg en Alemania adquirió un ejemplar. Posteriormente este zoológico comenzó un exitoso programa de reproducción, y todas las fosas del zoológico ahora descienden de la población de Duisburg. La investigación sobre los fosas de Duisburg ha proporcionado mucha información sobre su biología.

Fuentes:
Albignac, R. (1973). Faune de Madagascar
Springer, Primate Anti-Predator Strategies
Garbutt, N. (2007). Mammals of Madagascar, A Complete Guide Cryptoprocta ferox (Fosa) -
IUCN Red List
Mueller, Jenni; Sironen, Alan; Lukas, Kristen E. ( 2007). "Infant development and behaviour in the Fossa Cryptoprocta ferox"
Hawkins, Clare E.; Racey, Paul A. (2009). "A novel mating system in a solitary carnivore: the fossa". Journal of Zoology.
Wikipedia

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